¡Paz y bondad en vuestros corazones!
Desde el hombre de las cavernas hasta el hombre moderno, hubo desenvolvimiento y purificación de la indumentaria física, que se transformó a medida que el ambiente planetario se volvió menos cáustico y se expandía el intelecto humano.
El cuerpo físico, poco a poco, se volvió menos embrutecido, en conformidad con la evolución del planeta. Sin embargo, pasados los milenios de desarrollo y modificaciones de las estructuras planetarias, el ser humanos permaneció espiritualmente atrasado, sin conseguir dar el gran salto ascensional al plano que ya debería haber alcanzado, en caso de haberse modificado moralmente.
En muchas colectividades humanas, aún hoy, las personas viven y son tratadas como seres rudos y crueles, sin que sus déspotas permitan, al menos, el desenvolvimiento material.
Hay naciones que son verdaderas potencias económicas y tecnológicas, cuyos seres humanos, a pesar de la apariencia de civilizados, todavía masacran a sus hermanos en crímenes atroces y fomentan guerras, prejuicios y sectarismo.
Sin embargo, hermanos, la Tierra ha llegado a la cima de su desarrollo como planeta de pruebas y expiaciones y desea abandonar la banda del dolor, buscando la paz y la armonía en los planos y dimensiones superiores.
Para la humanidad dar verdadero impulso a la evolución moral, bastará adherirse a los códigos morales superiores de Dios Padre Creador, traídos por Jesús y varios Avatares.
El exilio -exilio planetario- es la realidad para aquellos que, a pesar de la apariencia física de seres evolucionados, prosiguen como almas atrasadas y embrutecidas.
Ama al prójimo como a ti mismo y servir a Dios con amor.
Perdonad y purificaos, pues la Nueva Era se acerca.
Jesús os bendice.
Emmanuel
GESH – 03/09/2022 – Vitoria, ES – Brasil