Hermanos, salve el Cristo Planetario que nos invita a la liberación de un pasado de errores, a través del servicio en beneficio del prójimo.

Invitamos a todos los hermanos del Planeta Azul, para que realicen las correcciones de ruta de colisión que han recorrido en la búsqueda desesperada de la felicidad ficticia en la materia.

Nosotros, vuestros Hermanos Extraterrestres, que ya hemos recorrido caminos que todos vosotros, en algún momento tendréis que recorrer, os recomendamos que no descuidéis vuestra vigilancia ni vuestra fe, que fortalece vuestro espíritu, para que soportéis la travesía dolorosa, que vislumbramos en el horizonte que oscurece, al transformarse en las "noches de tinieblas" (3 días de Oscuridad).

Es de conocimiento de todos, que en la pobre y primaria tecnología terrenal no hay máquinas ni armas capaces de atrasar ni impedir la precipitación de los gases nocivos que obscurecerán el Sol.

Ningún "habitante de las estrellas" tiene permiso para impedir que ocurra ese trágico evento; no obstente, ponemos al alcance de todos las advertencias y avisos sobre lo que hacer; cómo proceder, cómo prepararse, al verse frente al desencadenamiento de esta programación planificada hace milenios.

Recordemos que sólo se siente abandonado el hermano que voluntariamente se haya apartado de las Lecciones del Sublime Jesús.

Sólo siente el miedo paralizante aquel que no sintoniza su pensamiento con la Siembra amiga que le acompaña, mientras que se apega a la fórmula inocua de la vida perfecta en la materia.

Y finalmente, sólo posee miedo a la muerte, la criatura que aún no ha entendido que el espíritu es eterno, y que la vida en la Tierra es un pero en relación a la eternidad.

Abrid vuestros corazones, desapegaos de la materia y luchad con todas vuestra fuerzas, en pro de la liberación de vuestras almas, presas al atraso evolutivo.

Los días cesarán y las noches oscuras llegarán; pero si mantenéis encedida la luz de la fe viva en vuestro corazón, esta os guiará en la travesía segura, en medio de las turbulencias que inevitablemente vendrán.

Paz del Cristo Planetario.